miércoles, 11 de noviembre de 2009

interesante entrevista a Roberto MArtinez

Del antipatico que frente a un goal a la alianza en la definicion x el sub, (idiotez de Uribe, pues eramos largamente 1eros) donde hace el paso del cagon, pasando por su secuestro y su meada de miedo, al tipo mas o menos lucido que declara ahora, hay un gran paso y concuerdo en mucho con el.
Les dejo la entrevista del comercio.
Chau
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ACOSO TEXTUAL

"Solo iría a ver a Montaño"
Roberto Martínez habló de una posible final entre la “U” y Alianza y demostró su preferencia por el juego del colombiano Montaño que no tiene ningún crema. Reconoció que los jugadores de su generación no lograron nada en el ámbito internacional y que en su época ir a la selección no era ningún premio

Por: Elkin Sotelo

Ícono de los noventa, Roberto Martínez diluyó su presencia en la escena deportiva local por decisión propia. No quiso ser un entrenador ni gerente ni agente de jugadores. Del capitán de Universitario queda poco en la actualidad; solo algunas presentaciones que ofrece con el equipo peruano de Showbol.

Prefiere ahora, si tiene que dar una entrevista, concentrarse en opinar de fútbol y no de sus inevitables apariciones mediáticas por sus relaciones con conocidas estrellas de la televisión. Así se siente menos invadido ahora que interviene en varios negocios de rentas de inmuebles. Roberto habla esta vez de lo que serían los clásicos finales.

¿La ¿“U” es más en las finales que Alianza?
Te puedo hablar desde lo que yo viví, y mucho se recuerda el clásico final de 1995 cuando ganó la “U” con gol mío. Ese año jugamos cinco clásicos, y ellos nos vencieron en cuatro ocasiones, incluso nos humillaron 6-3, pero nos llevamos el clásico más importante. Antes hubo una liguilla a inicios de los noventa en que también le ganamos al Alianza con un gol que le hice al “Gato” Purizaga. Luego estuvo la final en Matute muy conocida y la última que llevaron a Trujillo. Puede decirse que estamos en ventaja, pero eso no indica que la de este año ya esté ganada. Para nada.

¿Te convence el sistema que emplea actualmente Juan Reynoso?
A Juan se le puede cuestionar su pésimo manejo con la prensa, pero en lo deportivo ya está casi en la final, y es puntero en el acumulado general, lo que indica que el balance es positivo. No hay que ser mezquinos con él. Creo que apuesta por ser más resultadista, y eso es normal, está cómodo arriba.

¿Cuántos años fuiste capitán de la “U”?
Seis años.

¿Y por qué no hay un trapo con tu rostro en la Trinchera Norte?
Nunca lo busqué. No era de los jugadores que iban a meterse a la tribuna como otros. Yo me retiré del fútbol y me desligué de este mundo por un tiempo. Soy hincha de la “U”, y siempre quiero que gane; pero nunca me interesó ser de los ídolos que tienen su cara en la barra. Me parece excelente que el “Puma” y Lolo tengan su imagen ahí, pero antes que otros deberían estar Héctor Chumpitaz, Lucho Cruzado, Toto Terry… grandes de verdad.

Tampoco vas al estadio a ver a tu equipo…
Es que cuando yo era niño iba al estadio a ver a Germán Leguía. Cuando yo jugaba la gente podía ir a ver al “Ratón” Silva, Nunes, Baroni; incluso, el año pasado me gustaba Mayer Candelo en la “U”. La última vez que fui al estadio fue en un clásico de este año, y fue para ver a Johnnier Montaño, y soy honesto. Me gusta ver buen fútbol; solo eso.

¿Quieres decir que en la “U” no hay jugadores de categoría? ¿Ni siquiera Solano?
Ñol es el único que puede dar un pase de 50 metros; al menos maneja los tiempos, es distinto. Creo que sus actuaciones en la “U” son positivas en general, y me parece más importante en lo extradeportivo.

¿Se entiende que crees que la final la ganaría Alianza?
No. No es que Alianza me agrade más. Yo siempre quiero que gane la “U”, y ojalá que la final sea ante los íntimos por el dinero que entraría a ambas instituciones. Aprecio a Montaño, pero nada más. No le deseo el mal, y no le tengo ni simpatía ni antipatía.

¿Por qué estás desligado del fútbol?
Escribo una columna para un diario, pero nada más. La única vez que quise entrar al fútbol me fue pésimo cuando compré al Estudiantes junto con mi amigo Lucho Ciccia. Nos cambiaron las reglas del juego, porque me dijeron que no habría baja, pero poco antes de empezar el torneo se instaló la baja. Al final Ciccia tampoco quiso arriesgar más dinero, y yo tuve que dejar de ir a ver a los jugadores porque no había cómo pagarles. Después de eso ya no creo que invierta así.

¿No te interesaría ser gerente deportivo en la “U”?
Ahora no. No descalifico a nadie, pero en este momento no tengo cercanía con los actuales directivos ni tampoco con los que se perfilan como candidatos. No sé si en el futuro.

¿Consideras exitosa tu carrera deportiva?
Es difícil decirlo porque pertenezco a una promoción que internacionalmente nunca ganó nada junto a Chemo del Solar, José Carranza, José Soto, Pablo Zegarra, Francesco Manassero, entre otros. En el fútbol todo cambió porque ir a la selección en mi época no era ningún premio, ya que entrenábamos en el club Revólver o en parques zonales, no nos pagaban, etc. Tuvimos la mala suerte de que el recambio de nuestra generación fuera brusca, ya que recién se habían ido monstruos como Cueto, y el proceso de renovación no fue el adecuado. En Ecuador llevaron a Dussan Draskovic, y empezó el cambió en ese país; Venezuela también trabajó mejor; Paraguay inició su crecimiento; pero en el Perú nunca se respetaron los procesos. ¿Cuántos técnicos habrán pasado desde el 86 hasta ahora por la selección peruana? Creo que ningún país nos igualaría en eso.

¿Perú tendría que hacer el intento por contratar a un entrenador de jerarquía internacional?
Mira a Chile; invirtió un millón y medio de dólares en Bielsa y ya está ganando más de diez millones. Haría todo lo posible por convencer a Sergio Markarián, le aseguraría su tranquilidad y apostaría por un proyecto a largo plazo. Es un tipo que te garantiza estar cerca del éxito.

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