Entrevista exclusiva del Diario Ole a Maradona Julio2009

ENTREVISTA MARADONA DEL DIARIO OLE

'Es lindo ser Maradona'Diego fue de la sonrisa al llanto y de la reflexión a la ilusión. Messi, Brasil, Riquelme, su nueva vida, su lucha y el volver a elegirse... Imperdible

¿Era más fácil ser Maradona-jugador que ahora Maradona-técnico de la Selección? -Indudablemente era más fácil ser jugador: pensaba solamente en agarrar la pelota y divertirme. Ahora tengo que estar al mando de veintipico de jugadores. Todavía hay situaciones que me cuestan. Les cuento una cosa, muchachos: el otro día hay un tiro libre en el entrenamiento y patea Messi. Yo me pongo en un costado, la pelota rebota en la barrera y me queda a mí... Y yo amago con sacar la zurda, estaba tan linda. Me salió el jugador de adentro. Me dije: la clavo. Alguno se habrá dado cuenta porque los ojos se me abrieron así...-En este momento de tu carrera como entrenador, ¿cuáles son las fortalezas que reconocés en vos y cuáles tus debilidades?-Sé que lo mejor que les puedo dar a los jugadores es toda mi experiencia y en eso me baso. Yo estoy seguro de que si ellos me ven bien a mí, ellos están bien. Y ésa es mi fortaleza. Y por supuesto que estoy recorriendo un camino de experiencias. Experiencias en las que me fue bien y también me fue mal, pero siempre mirando a los jugadores a la cara. Eso es lo que me han enseñado el Flaco Menotti, Bilardo, alguna vez el Coco Basile, Miguel Angel López...-¿Y qué aprendiste en estos ocho meses? ¿Qué cosas harías de otro modo si volvieran a ocurrir?-Yo lo que lamento en el alma es no haber tenido al Cabezón Ruggeri al lado mío. El sí tiene más experiencia y quizá me podría haber aportado. Tal vez podríamos haber hecho un trabajo mejor. Con Mancu y con Lemme me llevo muy bien y hacemos un buen cuerpo técnico. Y la ayuda de Bilardo, por supuesto. Cada cosa que hago le pregunto a Carlos.-Hay jugadores que decían que tenerte a vos es como ver a Dios en el vestuario. ¿Es un impacto que tal vez pueda servir para acelerar los tiempos de trabajo?-Yo asumí riesgos. El otro día escuché que Basile dijo que él había dejado a la Selección clasificada, y no es verdad. Todavía tenemos un camino largo para clasificarla. Yo viví el final del proceso de Basile en las Eliminatorias para el Mundial 94. La Selección estaba clasificada, pero tuvimos que ir a Australia al repechaje. Veníamos de ganarles a todos y los colombianos nos hicieron cinco. La Selección entonces no está clasificada. Todavía hay que luchar. Tenemos grandes jugadores. Y ahora se tiene que mostrar el temperamento de cada jugador para ir al Mundial.-¿Te preocupa la situación actual? ¿Te genera una ansiedad especial?-Preocupación no. Sí me genera una ansiedad tener que estar tanto tiempo imaginando el partido, no contar con los muchachos... Y no me gusta que haya que jugar con Rusia. Debemos armar el equipo para Brasil, pero en el medio se te mete este partido que no sirve.-¿Cómo manejás esa ansiedad en el día a día?-Hablando con los muchachos. Sabiendo cómo está Masche. Con Masche hablo mucho, hablo mucho con Heinze. A Messi es imposible encontrarlo. Es más fácil hablar con Obama que con Lío, ja. Pero a veces lo encuentro. Hablo con el Kun, con Maxi. Mato la ansiedad mirando videos también. Vuelvo a ver los partidos que hicimos. -El otro día contabas que te despertabas a las 4 de la mañana con una idea y te tenés que levantar para anotarla.-Es verdad, es verdad. Todo el tiempo se me ocurren jugadas. Por ejemplo, el otro día se me ocurrió una que se puede hacer dentro del área en una pelota parada. En vez de patear directo, me pareció que es mejor hacer tres toques porque el arquero se pone delante de los defensores que están en la línea del arco. La idea es sacar al arquero del foco con esos toques de distracción. Y se la dibujé a Bilardo y me dijo que le parecía bien porque sacaba del centro de la jugada al arquero y a los defensores que estaban en la línea y que se venían al primer toque. Son cosas que se me van pasando por la cabeza y las escribo y las metemos en las carpetas que llevan Mancu y Lemme.-¿Ves diferente los partidos ahora? ¿Los ves con otros ojos?-Sí, los miro totalmente distinto. Ahora no quiero que se me rompa nadie, sufro con cada patada. Cuando no hay jugadores míos, me preocupo más por ver cómo están parados, si juegan con línea de tres, si achican hasta la mitad de la cancha, si van a presionar. Personales ya casi no hay. Pero veo todo.-¿En qué momento de fortaleza en el cargo y de popularidad sentís que estás ahora? -Yo me la juego con los jugadores, me la juego con los chicos. A mí no se me va a caer ni la corona ni voy a perder los goles que hice ni nada por el estilo. Yo le tengo mucha confianza al equipo y estoy deseoso de jugar contra Brasil. -¿Leíste las declaraciones de Lucio? Dijo que quiere dejar fuera del Mundial a la Selección.-Sí, lo dijo cuando fue a llevarle a Lula la Copa Confederaciones. Vamos a ver si pueden. Tenemos cuatro partidos muy jodidos, pero nosotros les apuntamos a los brasileños. Brasil es el candidato a bajar.-Tevez suele ser muy auténtico y dijo que vamos a clasificarnos, pero con el culo en la mano. ¿Creés que es así? -Yo creo que nadie nos regaló nada. Si no lo obtenemos nosotros, Brasil no te va a venir a decir "tomen muchachos, acá tienen el plato servido". No, eso no va a suceder. Vamos a sufrir, vamos a enfrentar a un equipo que juega bien, que tiene cracks, que está ligando, que por jugar bien por mucho tiempo tiene Copas del Mundo a rolete. Pero nosotros somos Argentina. No hay que olvidarse de eso.-Si Paraguay le gana a Ecuador, ¿vos pensarías en el empate con Brasil como un buen negocio? -Yo voy a salir a ganar, no pienso en el 0 a 0. No me entra en la cabeza. Yo quiero tener cosas de Bilardo y de Menotti, pero no pienso en el 0 a 0 y en jugar para especular. O esconder la pelota. Esas son todas giladas que me parecen que al fútbol le hacen muy mal. Esconder las pelotas es de una bajeza total y absoluta, a mí no me va. Me sentiría muy triste si le estoy ganando 1 a 0 a Brasil y me esconden las pelotas. ¿Para qué? Si vinimos a jugar un partido de fútbol. Ojo, seguramente si le estamos ganando 1 a 0 a Brasil y tengo que poner un mediocampista más para parar a Brasil que se viene encima, lo voy a hacer. Voy a meter mano y hacer entrar a un metedor. Jugate la vida. Pero no pienso especular.-¿Es una gran noticia para vos jugar contra Brasil en Rosario? -Yo quiero que esto quede claro: no es lo que yo quería. Los jugadores fueron los que me lo pidieron. Desde los tiempos de Batistuta, de Crespo, no digo Riquelme porque por ahí me da la contra, todos decían que en River no se podía jugar. Y cuando llego a la Selección, lo primero que me dicen es si podemos salir de River. Yo les dije que iba a hacer todo lo posible. Después del partido con Ecuador hubo una reunión acá entre los muchachos, Julio y yo y le dijimos que queríamos ir a Rosario. Y así fue.-Esta decisión entonces la debés considerar como un triunfo personal. -A mí me da placer porque los jugadores juegan donde quieren, pero no es que nosotros vayamos en contra de River. La tribuna de River está a 50 metros de la cancha y por ahí hay jugadores que sienten que no tienen el aliento que pueden tener en Rosario. Ir ahí no te garantiza ganarle a Brasil, vamos a decir la verdad. Pero el aliento que nos puedan dar los rosarinos va a ser totalmente distinto del que sería en River. En River te podés quedar afónico de gritar y el aliento sólo va a llegar hasta atrás del arco.-Hace un rato hablabas de estilo y la definición del Clausura reavivó el debate. ¿A vos te gustaría que la Selección se parezca más a Huracán o a Vélez?-Yo quiero que la Selección tenga mi marca. No quiero que mi equipo se parezca ni al de Cappa ni al de Gareca. Vélez ganó bien porque lo apuró a Huracán y Huracán no jugó como venía jugando. Y los campeonatos se ganan jugando siempre igual. El campeón es el campeón de verdad. A Huracán lo aguantó Bolatti y Bolatti hoy ya está en la Selección.-¿Te sorprendió Bolatti?-Me sorprendió totalmente. Con la soltura que paró a cuatro de Vélez que lo atacaban por todos lados. Y él, firme en la mitad de la cancha, haciendo un trabajo conmovedor. Y además salía con personalidad y se la daba a un compañero. Me hizo acordar a Makelele en la final de Alemania.

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"Olé me sacó otro titular: Masche, Messi y nueve más

-¿A un jugador de Selección se le pueden enseñar cosas?-Sí, claro. Yo, cuando era jugador, me gustaba ver cualquier partido porque de todos sacaba algo. Y hoy en cada entrenamiento se puede aprender algo. Hasta Messi puede aprender. Por ejemplo, a Lío le puedo marcar que está enganchando demasiado para la izquierda. Y le digo: "Si amagás para la izquierda y te vas para la derecha, te vas solo". Se la dije en un entrenamiento y la hizo. Y salió bien. Pero depende todo de él. Porque si él tiene para enganchar para la izquierda y le mete bomba al arco, me va a decir: "Maradona, andá a cagar", ja. -¿Qué otras cosas te gustaría trabajar con él?-Me encanta trabajar con él, es un placer, hace todo fácil. Tiene la pelota pegada al pie, es parte de su cuerpo. O sea, vienen el pie y la pelota. Eso no lo vi en ningún otro y miren que vi jugadores, eh. Vi entrenar a Van Basten, a Careca, a infinidad de jugadores, a Houseman, por ejemplo. El Loco la tenía atada. Pero ninguno como Messi. -¿Querés enseñarle a ser un Maradona?-No, de ninguna manera. Messi tiene que ser Messi. Un día lo llamé por teléfono porque alguien me había dicho que estaba mal por salir segundo. Y le dije "dejate de hinchar las pelotas que se terminó el segundo puesto. De ahora en más pasás a ser el primero". Y después de la Champions y todo, se viene un Messi número 1, de taquito. El tiene que ser Messi, tiene que ir creciendo como crecí yo, con sus ideas. Es un pibe excepcional, que lo llamás y es pura ternura.-Cuando te atiende...-(Se ríe) Lo llamo y le digo: "Sí, con Obama", jaja. -Vos eras mucho más estratega, a él le falta eso.-Ojalá eso se lo dé el tiempo, que tenga más panorama. Lo que pasa es que hoy se tiene tanta confianza que es muy difícil ver a un compañero y darle un pase de un metro si ya dejaste a tres rivales en el camino. ¿Entendés? Querés seguir vos. Yo por ahí me limpiaba a dos y jugaba con mi compañero, pero eso también me lo dio la experiencia. -¿Te va Messi ahí atrás del nueve como jugó la final de la Champions y el clásico contra el Real? -Sí, lo puede hacer, pero como alternativa. Yo lo quiero por derecha, que empiece a sentarlos de culo porque ahí es donde a los defensores se les cruzan las piernas, ahí no tienen equilibrio. Cuando los encara de frente no se les cruzan las piernas. No sé si me entienden...-Por eso algunos dicen que a Messi hay que ponerle un 3 derecho. -Sí, pero ojo que Messi te hace tac y te limpió. Es todo de acá (se toca la cabeza), es cuando le cae la ficha. A Messi lo marca un derecho y se la puede quitar una vez, pero cuando le cayó la ficha, le amaga para acá, le sale para allá y sabés cómo se lo limpia...-¿Qué sentís cuando pasa minutos sin tocarla? -Le grito como loco, así se mete en el partido. -¿Se fastidia por no tener la pelota? -No es de fastidiarse. Se va del partido porque cree que el equipo no lo necesita y yo le vivo diciendo que lo necesita. Necesitamos de Messi para que se preocupen los contrarios. Si no, los contrarios están cruzados de brazos porque por ahí dicen "mejor que la tenga Mascherano, mejor que la tenga el Galgo, mejor que la tenga Maxi y que no la tenga Messi". ¡No! Messi tiene que estar en cada jugada nuestra, cada ataque tiene que pasar por él.-¿Le falta aprender a jugar sin la pelota?-Yo quiero que venga el mejor técnico del mundo y que me diga cómo es jugar sin la pelota. Jugar sin la pelota quiere decir llevarte una marca y dejar, por ejemplo, que Maxi pase por el lugar que dejó Messi. Pero no me importa que pase Maxi estando Messi, porque Messi puede encarar o puede ver a Maxi, tiene dos opciones. No quiero que Messi juegue sin la pelota, quiero que la pelota la tenga él. El va a saber qué decidir, pero con la pelota. No me gusta que pasen cinco minutos y no la toque, me vuelvo loco. No quiero que esté dando vueltas y mirando o haciendo así (levanta las manos). ¡Eh, eh! (aplaude). Se lo digo, "¡Golpeá las manos viejo!" (vuelve a aplaudir).-Vos querés que Messi sea tu Maradona. -Messi es mi Maradona. No hay un jugador más importante que Messi. Yo dije Mascherano y diez más y hoy puedo decir que en mi equipo titular también es Messi y diez más. ¿Entendés?... Olé ya me sacó otro titular, ja. Masche, Messi y nueve más, ja.-¿Qué te pasaba cuando no te llegaba la pelota? -Yo bajaba y quería tener contacto con la pelota. Eso es lo que le digo a Lío: "Al menos bajá y tocá la pelota; siempre hacete amigo, aunque se la tengas que sacar a Masche, un poquito, tac, pero siempre ahí, que tus compañeros se den cuenta de que estás vivo, que estás pimpante, que estás en el partido".-Y si hay que meter una puteada... -Sí, totalmente, y no se tiene que ofender nadie porque es lo mejor para el equipo. Yo les digo en las charlas: "Si hay que putear, hay que putear, muchachos" ¿Quién se va a enojar? Y es para todos.-Como decían con vos: a Maradona hay que dársela marcado porque así es más fácil que se saque el hombre de encima. -Claro. Lo que pasa es que Lío está jugando en un país en el que no se hace marca personal. Yo me acostumbré a la marca personal en Italia. Allá son los reyes de los marcadores. Yo salía a la cancha y ya sabía quién me iba a marcar porque salían todos, me esperaban, y atrás mío venía el que me iba a marcar. "Hola, ¿qué tal? ¿Bien? ¿Cómo te va? ¿La familia?" (risas). El del Atalanta, el del Lecce, el de la Roma, el del Inter. Cuando yo me limpiaba a mi hombre, la otra marca tenía que venir conmigo, entonces el otro nuestro quedaba libre. Ahí era cuando ¡tac!, tocaba y se le hacía un quilombo al catenaccio. ¡Se le armaba un quilombo al catenaccio, que ya no sabían para dónde agarrar! "¡Uyyy, mamma mia!", gritaban. Se rompía el catenaccio. "¡A Maradona, a Maradona!", decían. Y a Messi hoy no le hacen marca personal. Y entonces viene para atrás, se tiene que tirar de derecha a izquierda y se los limpia a todos, les cruza las piernas. Es muy difícil venir y marcar de costado, cuando les engancha y tiene esa facilidad de amagar para acá y para allá, los que lo vienen a marcar terminan así (cruza las piernas sentado). ¿Cómo hacés para recuperarte? Imposible.-¿Qué tiene Messi para mejorar? A veces, cuando juntás a los chiquitos arriba, parecen no tener conexión, que pecan de individualismo.-Sí, es para trabajar. Yo armé un 4-3-3 y no me gustó. No me gustó porque no logramos penetrar a la defensa rival. Uno esperaba del otro y el otro esperaba del otro. Y así nos pasamos 30 minutos sin tocarla. Para remediarlo tuve que hacer un esquema distinto, un 4-4-2, para que tengan mucho más espacio los de arriba y sacar a un chiquito. Me encanta jugar con los tres chiquitos, pero hace falta tiempo para trabajarlo. Y que se muevan y que vayan rotando. -¿Que no funcionen es un tema de movilidad o de generosidad?-Sin dudas es un tema de movilidad. No creo que este equipo no tenga solidaridad o que le falte generosidad. Eso además lo ves fuera de la cancha. Ves que Messi, Tevez y Kun se sientan en la misma mesa. Eso te da la pauta de que se llevan bien. -Por lo que decís no parece factible que vuelvan a jugar los tres juntos. -En el corto plazo no, porque no los puedo hacer entrenar. Si tuviera un mes para trabajar, tal vez podríamos agarrarle la mano al 4-3-3. Y ahí sí me animaría. La idea sería que Carlitos bajara porque es el que puede ser más enganche. Pero así no porque Kun se queda para empujarla, Tevez se va y a Messi se la damos y tiene a diez encima. Se hace muy difícil.-Tal vez habría que pensar un equipo para las Eliminatorias y otro para el Mundial, donde vas a tener como un mes para poder trabajar.-Claro, y ahí podría ser. Yo estoy pensando mucho en eso. El otro día, por ejemplo, vi a Verón y jugó en un nivel de Selección extraordinario. Yo digo que si Verón mantiene este ritmo de juego, el que mostró en la final con el Cruzeiro, es titular en mi equipo. El otro día, agarraba la pelota un jugador del Cruzeiro por el centro y tenía a Braña encima y a Verón redoblando. La agarraba un brasileño por la banda y tenía a Enzo Pérez y a Verón redoblando. Si tenés un jugador así, con ese despliegue más el pie que tiene Verón, no lo podés dejar en el banco.-¿Por qué creés que todavía no se vio a ese Verón en la Selección?-Porque la Bruja viene de muchas lesiones, no pudo jugar diez partidos seguidos. Por el gemelo o por la cintura o porque le pasaba algo. No se dio todavía. -En la Copa América pudo jugar seguido...-Sí, pero jugó de otra cosa. Jugó más de armador, más de "dame la pelota a mí". No jugó como la final. El Verón que vimos el otro día contra el Cruzeiro, ¡mamita! Parecía que tenía 22 años. Le dije: "Nene, qué tomaste, qué hiciste".-¿Lo llamaste?-Sí, lo felicité. Y le dije que piense en Brasil. -En el sentido de jugar para Messi, Verón te puede hacer de Xavi, con su pase filtrado. -Exacto. Verón tiene todo para dársela a Lío. Y además van a jugar Tevez o el Kun o Lavezzi o Milito o los que ponga. Van a tener más libertad también porque en cuanto Lío los empiece a apilar, van a tener que salir del fondo. Y si reculan, si ponen el culo al lado del arquero, Lío les va a romper el arco...-¿A Verón lo imaginás al lado de Mascherano?-Sí, exacto. -¿Y el enganche? ¿Lo resignás?-Sí, sin enganche. Verón, al lado de Mascherano. -¿La falta de un nueve tipo Batistuta es un problema?-Si hoy tuviera al Bati, ya estaríamos clasificados. Todos los goles que erramos, el Bati los hubiera metido con el orto. ¡Vamos a ser claros, muchachos! Yo fui al Mundial 94 y la primera pelota que le dimos al Bati, le pegó con el tobillo y la clavó en el ángulo. ¡La primera pelota que le dimos! Tic, tac, pum, gol. "¡Este es un fenómeno!", dijimos. Vos lo veías en los entrenamientos y pelota que salía del córner, le daba, palo y gol. Eso no lo tiene nadie.-Mirá si hoy tuvieras al Crespo de 25 años...-Estuve hablando con Crespito. Cuando volvíamos de Inglaterra y nos cagamos de frío con Mancu, fuimos a ver la Copa Italia. Jugaban Inter-Genoa y Mourinho lo puso a Crespo. Tuvo dos pelotas mano a mano, que el Crespo de cinco años atrás hacía pin pin y gol. Y tuvo esos mano a mano y en el primero hizo tac y se la agarró el arquero. Y en el segundo, tac y la tiró a la tribuna. Estuve hablando con él y le dije que lo que le había pasado era por la falta de fútbol. Es que no jugaba. Tenía a Ibrahimovic, a Adriano, a Cruz. Tenía todos adelante. Jugó ese partido no sé por qué. Pero si Crespo se pone bien, cómo no lo vamos a tener en cuenta. Pasa que estamos

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"Si Riquelme me prueba algo, juro que renuncio yo"

-Hablamos de tu aprendizaje como entrenador. ¿La renuncia de Riquelme también te hizo aprender algo?-Me hizo entender que no todo es lo que parece. Yo tenía un buen trato, no una amistad con él. No sé cómo me conoce... Marcos Franchi le habrá hablado de mí, porque yo nunca tuve con Riquelme una charla como la que estoy teniendo ahora con ustedes. Fue todo saludarlo por teléfono cuando ganó el campeonato o la Copa. Me dolió mucho lo que pasó. Yo lo llamé hasta cuando él se lesionó en Tandil para decirle que lo necesitaba para la Selección. Y me sale renunciando. Yo te puedo decir que a la Selección no se le dice que no. Por más que tenga un problema conmigo. Si él viene, me dice las causas y tiene razón, me voy yo. Si él me prueba algo como habla de códigos, juro por Benjamín que renuncio yo. Soy el primero en agarrar el auto y salir por el portón.-¿La palabra códigos es lo que más te molestó? -Sí. Porque no me conoce. No tuvimos tiempo... -¿Vos creés que hay otra historia? ¿Tendrá que ver con cómo se veía dentro del vestuario, o que ya no se sentía intocable?-Pero a él lo iba a mimar tanto como a Messi. Yo trato de estar adentro de las 25 cabecitas que cito. Y él era una de ellas. Ahora acabo de llamar a Lavezzi porque llegan cables de Nápoles que dicen de todo.... Acá nadie le iba a hacer daño a Riquelme, nadie lo iba a hacer entrenarse a las cuatro de la mañana. No sé qué habrá pensado... Hasta el día de hoy no puedo entender.-¿Pensás que le hace falta a la Selección?-Riquelme es convocable.-¿Resolvería algún problema del equipo?-El nivel de Riquelme es muy bueno, le haría muy bien a la Selección por el lado de la competitividad dentro del plantel. Si juega o no juega ya es una historia mía... Tendría más quilombo para armar el equipo, aunque siempre es mejor la abundancia.-Con Basile no había dudas de que jugaba. Hasta cuando estuvo colgado en Villarreal fue titular.-Pero él no fue a Francia porque tenía que jugar en Jujuy... No le busquen peros, porque Riquelme entraba en los equipos que estaban en mi cabeza. Lógico que después tuve que desarmar todo y empezar a armar sin él.-Vos habías quedado contento con la velocidad a la que se jugó el amistoso con Francia.-Riquelme tiene una velocidad mental poco común. En el fútbol no importa quién corre más rápido. Si no jugaría Carl Lewis o Ben Johnson. Riquelme tiene una velocidad mental que te puede dejar mano a mano con el arquero.-Hace poco declaró que quiere que este año sea el mejor de su carrera...-Ojalá, se lo deseo de todo corazón. Porque yo no tengo nada en contra de él. El único pecado que cometí fue meterlo en una lista de la Selección. Así que le deseo lo mejor del mundo.-Si Riquelme vuelve a brillar, ¿harías algo más para que se reconcilien?-No, esto es fútbol. Acá hay jugadores que dejan todo para venir. Por el amor a la camiseta dejan sus clubes, hacen viajes de 15 horas, dejan a su familia. Eso hay que respetarlo. Los que están tienen el derecho a seguir estando. Los que no quisieron estar, tienen que quedarse en su casa.-¿Su función se tiene que repartir entre varios?-Ahora tenemos que atacar por otros lugares. -¿Por las bandas en quiénes pensás?-Pienso en Jonás Gutiérrez, en Maxi Rodríguez. Tenía la variante de Di María, pero le dieron por la cabeza, le dieron perpetua con la suspensión de cuatro fechas por la roja en Bolivia. Ahora cité a Dátolo para que me haga la punta izquierda pensando en Rusia.-No sobran muchos jugadores por afuera.-No, no sobran. Tengo a Lucho González, lo quiero enchufar por derecha.-¿La fantasía de Riquelme entrando como Diego en el 94 es posible? ¿O ya es un caso cerrado?-Creo que sí está cerrado. Aunque nada es definitivo... Pero Riquelme tiene muchas cosas que explicarle al plantel. Tendría que haber reuniones con el capitán, con el grupo... -Grondona dijo que tiene la llave para que vuelva, ¿cuando escuchás eso qué pensás?-Durante 15 años escuché que yo tenía las llaves de Ezeiza y siempre estaba afuera... Cuando juro por Benjamín es porque lo quiero ver crecer, lo amo con toda mi alma, con la última gota de sangre que tengo. Por eso digo: que ellos sigan hablando... Riquelme no quiso venir. Y Grondona nunca me habló de Riquelme, así que yo estoy tranquilo.-¿Sentís que del lado de Basile se plantea alguna sospecha sobre los jugadores? El Ruso Ribolzi dijo que la renuncia de Román tenía que ver con la renuncia de Basile...-No lo escuché. Y no creo que tenga tiempo para escucharlo a Ribolzi...-¿Te jodió que Basile declarara que no iba a decir por qué se había ido?-En absoluto. Si él quiere mantener el secreto...-¿Hay jugadores que te aportan en el vestuario más allá de la cancha?-Sí, y por eso los traigo. El grupo está sólido, muy bien. Lo ves cuando vas a la comida, cuando hacen el loco, en el micro... -¿Ese manejo de Heinze te sedujo para hacerlo subcapitán del equipo?-Puede ser. Pero mirá que hay jugadores con personalidad, como Mascherano... El que me rindió y se ganó mi corazón fue Jonás, al que tenían relegado.-¿Zanetti te dio vuelta en el amistoso de Escocia?-Zanetti también me ganó el corazón. Yo creía que iba a venir para hablar de una manera y vino como un señor. Hablamos de señor a señor. No me pidió ninguna explicación. Jugó, sigue y hoy tenemos una gran relación.-Hay técnicos que quieren a uno bicho para que se peleen entre ellos y saquen lo mejor. ¿Cuánto pesa la personalidad de un jugador que rinde?-Lo manejaría yo. Por más que sea Jairzinho, si no le va al grupo a mí no me va. Se tiene que adaptar al grupo. No es importante uno por más que haga tres goles por partido. Hay que respetar al grupo, ser buena gente, acá no hay bichos. Yo compartí planteles con bichos y los cortaba. Y te estoy hablando de nombres jodidos.-¿Nunca sirve tener un bicho?-No, yo a los bichos los corto.

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El sonido de una confesión

Hubo un momento donde apoyó la espalda contra el respaldo del sillón y dejó de estar alerta. Toda la tensión de la charla, provocada por la dinámica de interrogatorio policíaco que a veces suele tener adosada la entrevista como género, se disipó. Y la voz de Diego entonces surgió desde otro lugar, desde uno mucho más profundo y revelador. Mirar sus ojos húmedos y poder escuchar las confesiones del hombre que todos los que estábamos ahí admiramos hasta la veneración fue conmovedor. Esos límites profesionales que nos planteamos como una religión en el vínculo con el entrevistado estuvieron a punto de borrarse con lágrimas. Las preguntas ya casi no tuvieron sentido: lo valioso fue oír los murmullos de la reflexión descarnada y autocrítica de un tipo que hablaba de su vida con la implacabilidad de lo irreversible, pero no desde el reproche sino desde una resignación sabia. Maradona está donde quiere estar. Ese confort se refleja en su decir, en el entusiasmo por el trabajo, en el cambio sideral en la relación con la gente. El entorno sídieguista mutó por un grupo de compañeros de trabajo, que lo reconocen como el jefe, pero que no se someten a un servilismo idiota. Diego puede hoy, sin dejar de ser Diego, admitir debilidades como entrenador. Pero a la vez, él sabe mejor que nadie cuáles son sus fortalezas y cómo hacerlas pesar. La entrevista dura lo que dura. Cuando termina ya en Ezeiza está oscuro. Todavía tiene tiempo, Diego, para posar con una réplica de la Copa. La quiere de recuerdo, pero el dueño se le planta. Se le puede decir que no. Se va solo para su casa después. Sin guardaespaldas. Ya no los necesita.

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"Yo estuve en un lugar muy negro"

Hace un tiempo dijiste: "Si no hubiera tomado nada, qué jugador habría sido". ¿De verdad pensás eso o es una broma?-¡Es verdad! Si hubiera dormido el 30% de lo que debe dormir un buen profesional, habría sido el mejor del mundo, ja.-¿Si nacieras de nuevo elegirías ser el Maradona que fuiste o dormirías?-No... Estoy tan arrepentido de no haber visto crecer a mis hijas (frena la frase y siente cómo se le humedecen los ojos)... Tengo como un pedazo de corazón roto. Cuando Claudia me decía "quedate" y las nenas estaban jugando, yo me iba. Y eso lo tengo puesto acá adentro (señala el corazón). No me lo puedo sacar.-Debe ser difícil ser Maradona...-Es difícil, cada vez que te levantás tenés un desafío distinto. Te van pasando cosas en la vida y tenés que afrontarlas. Pero es lindo ser Maradona... Con adversidades, con muchas cagadas que me mandé. Acá no tienen la culpa el viejo y la vieja, porque ellos no me enseñaron a tomar droga. Yo lo hice por estúpido, por eso daría las dos piernas por volver el tiempo atrás y ver crecer a mis hijas. No lo haría para jugar al fútbol sino por ver crecer a Dalma y a Gianinna.-¿Ves en Benjamín una posibilidad de reparar algo? Antes jurabas por Dalma y Gianinna. Ahora también por Benjamín...-Sí, se puede reparar, pero es algo que te queda para siempre marcado a fuego. Igual a Benjamín lo voy a mimar como a nadie... Hoy veo los videos de las nenas que grabó Claudia y... -¿Y qué ves?-Veo a un boludo que se creía el dueño del mundo y era un idiota que no sabía disfrutar de sus hijas. -¿Te creías Maradona?-Me creía Hércules, y era un idiota.-A pesar de ese dolor, ¿no compensa el hecho de que hoy tengas la lucidez para darte cuenta?-Sí, eso me dicen mis hijas. Pero ver la filmación que Claudia las está bañando y yo no estaba... Dalma me dice: "Papi, podés trabajar, dar una charla, conducir la Selección... Le ganaste a la droga. Te podés levantar todos los días...". Pero me faltan cinco para el peso.-Tus hijas no te reclaman. Sos muy duro con vos.-Eso es verdad. Es una película de la vida que a uno le pega muy fuerte. Yo hubiese querido vivir de otra manera, disfrutar de mis hijas. Pero no podía. Quería salir y seguía enganchado... Cada vez más. Me creía el valiente de la historia, y me pasaban los años como un Fórmula 1. Y hoy llego a los 48 años, con un nieto, y digo: "Mirá vos, no tengo una felicidad completa, no pude llevar todos los días a las nenas a la escuela".-Suena trágico. Tenés mucho por delante...-No es dramatismo, digo lo que siento. Mirá que soy fuerte, eh. Y me ayuda mucho el hecho de que Dalma y Gianinna hayan salido como salieron. Eso se lo tengo que agradecer a Claudia, toda la vida. Esperemos que Dios me perdone todas las veces que no estuve con las nenas cuando me necesitaban.-¿Esto lo hablás con alguien? ¿Un psicólogo?-No, no creo en los psicólogos. Lo hablo con ustedes. Me dio vuelta el chip cuando Dalma me contó lo de Gianinna. Yo estaba tirado en la camilla y ella me dijo que tenía que vivir para ella (recuerda con la voz quebrada). No fui al psicólogo, no tuve psiquiatra, no me dieron ninguna inyección para decir no tomo más droga... Ojo, con esto no quiero mandar ningún mensaje, porque es un tema muy jodido. Yo gracias a Dios zafé.-¿Tus hijas se sienten más orgullosas de tus proezas futbolísticas o de tu batalla personal? -De la batalla personal. Y me lo dicen... -¿Te sentiste inmortal? -Yo estuve en un lugar muy negro, con ganchos que me sacaban de un aceite negro y me tiraban para arriba. Se lo conté a mis hijas... Así estuve un montón de tiempo, hasta que un día desperté. Los ganchos me querían sacar.-Tenías que agarrarlos vos para salvarte.-Claro, tenía que salir yo. Seguramente era el coma o la muerte, algo de eso era... Hasta que un día desperté y las vi a Dalma y a Gianinna adelante mío. -¿Esa es la primera imagen que tenés?-Sí.-Naciste de nuevo.-Y sí, si estaba muerto...-Si no eras Maradona te hubieses muerto. Uno de nosotros no zafaba...-A otro el gancho lo tiraba para abajo y además tenía una piedra, ja. A mí gracias a Dios el gancho me agarró. No era mi hora, o por ahí por tantas cagadas que hice me dio otra chance. "De otra no te salvás", habrá dicho el Barba.-¿Qué te gustaría hacer de ahora en más?-Me gustaría quedarme en el predio diez años. Y después dejar a otro. Dejarlo con títulos, con gloria...-Hablás de gloria. ¿Qué es la plata para vos?-La plata es para pagar mis deudas. Las pago desde el momento que me separé de Coppola. Tener para vivir bien y no deberle nada a nadie. En un momento creía que tenía 20 palos y de la noche a la mañana me encontré que le debía 50 a uno, 40 a aquél, 100 al otro y yo no sabía nada. -¿Cuánto hace que no vas a un banco?-Uff (piensa sin encontrar la fecha exacta). Diez años fácil, un montón...-¿Tenés plata en el bolsillo, en la billetera?-En la cartera tengo. A ver... (saca su billetera marrón de un bolso sin mucho glamour). Los fasos, teléfono, ven que tengo plata...-Pero hay muchos de 2 pesos, Diego.-Ja, es verdad. Hacen bulto, por si me chorean, ja.-¿Qué más?-Perfume jamás falta (saca uno chiquito, de envase azul y de paso se pone).-Trucho, ¿no?-Obvio, imitación, ja.-¿Fotos en la billetera?-Miren a quiénes tengo. A mis reinas (muestra orgulloso distintas fotos pequeñas de Dalma y Gianinna). -A Benjamín lo tenías en un celular. ¿Cuántos teléfonos tenés?-Dos (uno es negro, normal, nada de iPhone; el otro no está a la vista)... -Uno que atendés y otro que filtrás, ¿no?-Sí, el de Batman, ja. Este es Benjamín, sabés qué grande que está. Acá tengo más fotos (se las alcanzan, las agarra y las besa).-Parecido al Kun Agüero. Ahí perdiste, Diego.-Essstás looooco. Es la madre cuando era chiquita. -¿Qué hacés cuando estás con él?-Todo el día a upa. En el bautismo salí yo en todas las fotos. Y Claudia me dice "hijo de puta, me dejaste afuera de todas las fotos...". "Pero si vos lo tenés todos los días, guacha, ja". Cuando está en España lo veo por la camarita de la computadora...-¿Cocinás en tu casa?-Nooo. Como lo que haya en la heladera. Y, nada... A Vero mucho cocinar no le gusta. Así que hacemos mucho delivery.-¿Asado?-Sí. Viene alguien y...-¿Vos nunca hiciste el asado?-No, no hice un asado en mi vida.-No podés no haber hecho nunca un asado. Sos Maradona. Te caíste.-¡Paren! Yo les voy a explicar. Soy el quinto hijo después de cuatro hermanas mujeres. Yo pedía un café y se chocaban para hacerlo. Mi vieja decía Lili, el nene quiere un café; Kity, el nene quiere comer; Ana, el nene quiere... ¡Soy un inservible, boludo! ¿Me entendés? Mi viejo no me dejó nunca hacer el asado. Y ahora viene mi suegro. Y si no voy de mi vieja.-¿Ves películas? Tele...-Sí. A Marcelo lo abandoné este año porque no me gustó lo de los políticos. Me pareció que con los políticos dentro de Gran Cuñado nos estaban faltando el respeto a los que votamos. Que vaya De Narváez, quedaba como un pelotudo. Macri lo mismo... Todos los que fueron, a mi modo de pensar, quedaban como unos pelotudos. Era decir 'acá estoy, vótenme'. Pero a Tinelli lo adoro. Les saca años luz a todos en la televisión, un fenómeno.-¿Ves alguna ficción?-No. ¡Valientes no veo! Si ésa es la pregunta, ja. Déjense de hinchar las pelotas con Valientes (grita, maradonea). Están todos con "Valientes hizo 30 puntos", Qué me importa.-¿Películas?-A veces alquilo, o pongo del 500 para arriba y agarro cualquier película. Si no, boxeo. O me engancho con algún Mente criminal.-¿Es cierto que mirás mucho fútbol americano?-Sí, sí, me encanta. No un equipo, pero me gustaba Favre, el 7 que se fue de New York. Yo quiero ser Peyton Manning. -Y si por un día dejás de ser Maradona...-¡Sería Richard Gere! ¡Richard Gere, papá!-No, la pregunta es si fueras un anónimo...-Nooo. ¡Elijo yo! Vos hacés la pregunta pero la respuesta la elijo yo, ¡qué vivo que sos! Un día dejame... Lo vi de lejos, estábamos en la Partita de Cuore, en Milano. Hasta la mitad de la cancha solo el chabón, la camisa blanca fuera del pantalón... En una cancha hay más hombres que mujeres, ¿viste cuando las minas hacen uuuuhhhh? Dejaaaaame serrrrlo a mí.-Pero estás en la Argentina y nadie te conoce.-Me encantaría caminar por Florida, recorrerla toda sin que nadie me toque. Poder ver negocios, pero eso es imposible (se resigna).-Que no te toquen el hombro. ¿Por qué esa obsesión?-Si vos dejás que te metan la mano, después te agarran de acá (se pone las manos sobre los hombros con peso muerto) y te tiran. Sin el hombro sale igual, ja. Pego cada esquive...-¿A quién te gustaría ver? ¿Qué foto querés vos?-Quiero conocer a Tiger Woods, si me deja Obama... Quiero ir a ver un partido de Manu Ginóbili. Quiero ver uno de fútbol americano, estar ahí, porque los lunes no me pierdo un partido, ja. Vero me dice "ya terminó"; y yo "nooo, Vero, no terminó", porque son largos. Me gustan las jugadas, fá-fá-fá (sic), estrategia pura. Les puedo chorear alguna.-Se enojaría Menotti.-Callate... Una vez vamos a entrenarnos al Jockey Club y había un piquete de la gente del béisbol. En serio, ¡un piquete! No nos dejaban pasar. "El béisbol es grande acá y en el mundo", decían a los gritos. Yo me preguntaba qué había pasado. Cuando nos dejaron entrar, averiguo. Y ahí me muestran El Gráfico... Había un título de Menotti que decía: "Todos los boludos juegan al béisbol".-¿Hay algo que no te pudiste comprar?-No. Creo que todas las cosas que quise me las compré. Igual hoy vivo obsesionado con dejarles todo lo que tengo a mis dos hijas y a Benjamín. No es que estoy haciendo mi testamento, eh. Pero ya tengo cosas materiales.-¿Cuánto costaría tu pase hoy? Una fortuna.-Son otras épocas... ¿Cristiano vale 96 millones de dólares? ¿Eso pagó el Real Madrid? Yo valdría 96 millones y 100 dólares, ja.-¿De dónde sacás las frases? El otro día tiraste la última con Higuaín.-Imaginate: si traigo a Higuaín para jugar en Córdoba, los del Real Madrid me tiran con pibes, boludo. No con piedras, ¡con pibes! Pero son cosas mías. Salen solas. Ni ésa de "la pelota no se mancha". La preparé en mi partido despedida en la cancha de Boca. La preferida es "más falso que dólar celeste". Es buena.-¿Y la frase "qué querés si es arquero"?-Es que... Nosotros de arqueros estamos bien con Andújar y Carrizo. Pero igual me jodió mucho la lesión de Chiquito Romero, venía así (lleva la mano hacia arriba). Se lesionó por pegarle una piña a una pared a la entrada del vestuario. De arqueeeeeero, ja.-¿No conocés ningún arquero normal?-Ninguno, ninguno. El mejor arquero que vi en mi vida fue el Pato Fillol. Y me dije: "Este debe ser normal". Lo boludo, ja. Pero le tengo mucho cariño.-¿Goycochea zafa?-(Duda) Es amigo. Es piola. Goyco rompe la media. -Goyco fue modelo, un poco periodista...-Digo la verdad: Goyco está en una patineta. Lo quiero un montón. Pero ni el Pato era normal, terrible.-Otra frase bien maradoniana fue que la cancha de Fiorito estaba mejor que el Monumental. -Más allá de las frases, acá vuelvo al fútbol: yo lo que quiero es una cancha que reúna las condiciones para que el jugador se sienta cómodo. Vos vas a la cancha de River y tenés las canillas del 78, que yo las vi en el Mundial y las vuelvo a ver en el 2009. Entonces me parece que hay algo que no va. Si estamos haciendo la arenga para salir a la cancha y el Gringo Heinze pega en el techo del túnel y se cae toda la mampostería... Hay algo raro.-Pero...-(Se embala) Un día estaba mirando la previa de un partido de Copa de River contra un equipo mexicano en el que estaba Scoponi. Le pusieron los auriculares a Scoponi, empezó a mirar y dijo: "¡Qué vieja está la cancha de River!". Me quedó grabado. Del 78 al 2009 pasaron años. ¡Que no sean malos! ¡Que no se enojen conmigo! Yo les digo. Si de remodelar el vestuario tuvieron tiempo, ganar plata con los recitales la van a ganar igual. Pero metiendo el recital de los Jonas Brothers ésos después del partido de la Selección. -¿Cómo es un día tuyo?-Me levanto al mediodía, como algo y me preparo para venir al predio. Tengo las anteojeras que sólo me marcan el portón del predio de la AFA.-¿Se dividen para ver videos y discutir?-Vemos a todos los jugadores que podemos y todos los partidos que nos da el tiempo. Después los comentamos. Hay muchachos que uno no vio pero lo vio el otro. Nos dividimos, nos vamos turnando entre todos, con Mancuso y Lemme.-¿Leés los diarios?-Sí, Olé, Clarín...-¿Leíste que Caruso Lombardi dijo que a Messi lo pondría de suplente?-Decile a Caruso que si vas perdiendo 3-0 y lo dejás a Messi para los últimos 20 minutos te lo metés en el orrrrto. Decile que digo yo, Diego Maradona, que no diga boludeces. Somos grandes, Caruso. Mirá que yo lo conozco.-¿Tenés cábalas?-Sí, pero tampoco ir arrodillado arriba de maíz. Uno las hace, pero no vas a ganar por las cábalas.-Talco no.-No, boludeces no. En el Napoli quizá nos sentábamos todos en un lugar. Si ganábamos se respetaban los lugares. Pero si nos comíamos cuatro se iba la cábala a la mierda, ja.-¿Hacés promesas?-Sí, fui a la Virgen de San Nicolás hace tres meses. A agradecer por Benjamín y de paso a pedir...-¿Vos sabés cómo se gana un Mundial?-Siiiiii.-¿Cómo se gana?-Primero clasifiquemos y en la próxima nota te digo cómo ganar un Mundial...

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La promesa ante Olé
Diego se prendió en el juego a su modo. No quiso escribir en un sobre cerrado qué prometía si le ganaba a Brasil. "Escriban ustedes y yo lo hago", propuso. Y aquí va nuestra propuesta, totalmente realizable: como nunca hizo un asado, si hay triunfo él debe ser el encargado de prender el fuego y debutar. Nos gusta a punto...

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